La noche llego aplastando los recuerdos, ya mi cuerpo se canso de sentir y no te espera. Tu relfejo se fundio e innundo mi corazon, los pasos son lentos y nuestro pies sangran cariño.
el aire esta frio y denso, vuelan algunas letras y las hojas se desangraron, no quieren volar a tu lado, se cierra la prision lacerando mis pensamientos absurdos, mis ilusiones ambiguas con cantos ansestrales, con sonidos del viento que se desgarran en mi piel que expira ingenuidad.
mis ojos se empaparon en tu honor, los cierro y no logro ver más que tu imagen perfecta, que tus ojos que conozco segundo a segundo y que me cuentan historias fantasmales de almas inocentes, estremeciendo mi cuerpo y enviandonos a nuestro propio universo volando despacio y temerosos de ser vistos por verdugos del mundo real.
acaricio tu piel como buscandome entre tus poros donde se apilan mis escritos, ya son demasiados y las hojas cortan mis dedos hasta desangrarme en tu imagen, el viento ya reinventado se filtra por callejones llenos de vacio y los maullidos de los gatos son llamados al cielo para curar mis heridas ya conocidas por la tierra. La razon no ha cambiado en nada y la esperanzade fijar mi mirada en ti esta borrosa, tus pies no chocan con la luna y en ti se manifesto la armonia
Camilo Orjuela
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